Los archivos personales de Hernán Kesselman se abren en una jornada homenaje

Una jornada en homenaje a Hernán Kesselman, psiquiatra y psicoterapeuta argentino, se realizará este viernes 30 de junio en la Biblioteca Nacional donde se presentarán archivos personales donados a esa institución y material audiovisual donde aparecen desde “Tato” Pavlovsky a Juan Domingo Perón, con la idea de reflexionar sobre su vida y trayectoria.

De la actividad participarán quien fuera su pareja por medio siglo Susana Kesselman, Ana María Fernández, Juan Cristóbal Tenconi, Ana Guerra y Alejandro Dagfal, con la coordinación de Luis Sanfelippo, a las 18, en el auditorio Jorge Luis Borges.

“La idea es presentar en sociedad los archivos de Kesselman que recibió la Biblioteca Nacional. Hay mucho material tanto en papel como audiovisual, con muchos referentes psi como ‘Tato’ Pavlovsky y Armando Bauleo, pero también de la cultura general como Pino Solanas, incluso Perón”, explicó Sanfelippo, del Centro de Historia Psi de la Biblioteca Nacional y agregó que la idea es también “reflexionar sobre su vida, trayectoria y obra, así como de sus relaciones con el psicoanálisis, la psicoterapia, el psicodrama y la cultura”.

La donación del archivo efectuada por su familia comprende cartas, documentos institucionales, borradores de clases, manuscritos, cassettes de audio, filmaciones de cursos y congresos inéditos que constituyen un material ineludible para la investigación de la historia de las disciplinas psi en Argentina y en el mundo.

Kesselman (1933-2019) fue un médico psiquiatra, psicoanalista, psicólogo social, psicodramatista y psicoterapeuta argentino de gran reconocimiento internacional que fue miembro adherente de Asociación Psicoanalítica Argentina y se analizó con Marie Langer y se formó con Pichón-Rivière.

En los años 60, dirigió el área de Docencia del Hospital Lanús, y en 1971, fue uno de los líderes de Plataforma, movimiento internacional de psicoanalistas. Durante la última dictadura militar, tuvo que exiliarse con su familia en España donde continuó su actividad hasta su regreso al país en 1986.

Compañero de ruta de Armando Bauleo, Emilio Rodrigué y, especialmente, de Eduardo “Tato” Pavlovsky, llegó a ser un referente ineludible para varias generaciones de psicoanalistas, grupalistas y trabajadores de la salud mental.

Entre sus libros, se destacan Psicoterapia breve (1970), Las escenas temidas del coordinador de grupos (1978, junto a E. Pavlovsky y L. Frydlewsky), La multiplicación dramática (1989, junto a E. Pavlovsky) y La psicoterapia operativa: crónicas de un psicoargonauta (1998).

La Biblioteca Nacional está ubicada en Agüero 2502, de la Ciudad de Buenos Aires.