Qué son y cómo funcionan las Comisiones de la verdad sobre abuso sexual en la infancia

Publicado: 11 / 04 /2023


A nivel mundial 1 de cada 5 mujeres y 1 de cada 13 varones han declarado haber sufrido abusos sexuales durante su infancia Foto Ral Ferrari
A nivel mundial, 1 de cada 5 mujeres y 1 de cada 13 varones han declarado haber sufrido abusos sexuales durante su infancia / Foto: Raúl Ferrari.

Sobrevivientes de abusos y representantes de diferentes organizaciones de Latinoamérica impulsan la creación de comisiones de la verdad en los países de la región como respuesta a la violencia sexual en las infancias y adolescencias, organismos que tienen por objetivo principal producir “una verdad histórica de un tema totalmente invisibilizado” y representan “un cambio de paradigma total”, ya que a diferencia de los juicios por la verdad, incorporan recomendaciones para implementar reformas.

Luego de que en los últimos días se pusiera en agenda el tema de los juicios por la verdad a partir de declaraciones del conductor televisivo Jey Mammón, quien fue acusado por abuso sexual por Lucas Benvenuto, organizaciones dedicadas que trabajan situaciones de abuso en niñez y adolescencia advirtieron que estos juicios son “un premio consuelo”.

“El juicio por la verdad nos parece una solución de silenciamiento de la víctima. Es como decir ‘con eso quedate tranquilo’ y el sobreviviente quiere justicia real”, indicó a Télam Sonia Almada, psicoanalista y directora de la Asociación Civil Aralma.

Es que esta instancia se da en casos en los que el delito se encuentra prescripto por el paso del tiempo, por lo que no se puede aplicar pena a la persona denunciada.

Frente a estos juicios sin efectos penales, activistas por la promoción de derechos de infancias destacaron la importancia de las comisiones de la verdad que tienen por objetivos esclarecer hechos; recibir los testimonios de las víctimas; y crear un informe final con recomendaciones dirigidas al Gobierno e instituciones para implementar las reformas necesarias para prevenir la repetición de los hechos y garantizar una reparación integral de las y los sobrevivientes.

En toda Latinoamérica, distintas asociaciones buscan crear comisiones de la verdad que atiendan la violencia sexual en las infancias, algo inédito en la región, y que se inspira en las experiencias fructíferas que llevaron adelante varios países, como Australia, Irlanda, Alemania y Canadá.

Sonia Almada psicoanalista y directora de la Asociacin Civil Aralma Foto Florencia Downes
Sonia Almada, psicoanalista y directora de la Asociación Civil Aralma / Foto: Florencia Downes.

Con el objetivo de debatir cómo se pueden establecer estos órganos en la región, se realizará el próximo viernes 14 un evento en la provincia de Buenos Aires organizado por la Asociación Civil Aralma y la Red Internacional por los Derechos de lxs Niñxs (Child Rights International Networ), que también contará con la presencia online de referentes internacionales.

Chile es el país de Latinoamérica que está más cerca de establecer una comisión de verdad en respuesta al abuso infantil institucional, y solo “depende de que el presidente Gabriel Boric firme un decreto”, indicó en diálogo con Télam Eneas Espinoza, fundador y coordinador de la Red de Sobrevivientes de Abuso en Entornos Institucionales de Chile.

El año pasado, Naciones Unidas urgió al gobierno de Chile a crear una comisión “independiente, imparcial y adecuadamente financiada” sobre los casos de abuso infantil dentro de la Iglesia Católica y en centros residenciales de la Secretaría Nacional del Menor (Sename).

Otro país que registra avances es Perú. En 2019 se presentó el informe final de la Comisión Investigadora de abusos sexuales contra menores de edad en organizaciones compuesto por 1.394 páginas.

Es considerado “el mejor informe final que haya hecho una comisión investigadora en la historia del Congreso del Perú”, aseguró a Télam desde Lima Jose Enrique Escardó Steck, quien fue la primera persona que denunció los abusos contra menores cometidos por el grupo religioso Sodalicio de Vida Cristiana y fundó la Red de Sobrevivientes Perú.

Sin embargo, como se trató de una comisión parlamentaria, el informe tenía que ser aprobado en el Congreso, algo que nunca sucedió y permaneció archivado hasta 2022, cuando el documento se hizo público gracias a una alianza entre la Red de Sobrevivientes Perú y la congresista Susel Ana María Paredes Piqué.

“A pesar de las presiones, venimos trabajando para que se haga conocido”, apuntó Escardó Steck y aseguró que “cualquier comisión que investigue y emita algún tipo de conclusión, más allá de que no se pueda poner en práctica, es una victoria mediática o social. La gente puede entrar a internet y encontrar la verdad”.

Jose Enrique Escard Steck la primera persona que denunci los abusos contra menores cometidos por el grupo religioso Sodalicio de Vida Cristiana Foto Congreso de la Repblica
Jose Enrique Escardó Steck, la primera persona que denunció los abusos contra menores cometidos por el grupo religioso Sodalicio de Vida Cristiana / Foto: Congreso de la República.

Para evitar los riesgos de las comisiones parlamentarias, los especialistas consultados por Télam explicaron la necesidad de establecer comisiones de la verdad independientes, que consisten en investigaciones a gran escala sobre violaciones de los derechos humanos cometidas en el pasado.

Tienen un tiempo determinado de duración, la integran grupos de expertos con gran prestigio que provienen de diversas instituciones o de la sociedad civil y que no pertenecen a partidos políticos.

“El objetivo central es producir una verdad histórica de un tema totalmente invisibilizado, ocultado y sepultado del que todavía no se quiere hablar”, indicó Almada.

Por eso, estas comisiones aplicadas a casos de violencia sexual a niñas, niños y adolescentes son “un cambio de paradigma total en relación a cómo se ha tratado el abuso sexual infantil, que siempre queda adentro de los consultorios o en las denuncias judiciales”, añadió la psicoanalista.

De crearse estas instituciones, el abuso se convertiría “en un problema social y la sociedad puede ir y contar aquello de lo que fue víctima”, apuntó Almada.

A nivel mundial, 1 de cada 5 mujeres y 1 de cada 13 varones han declarado haber sufrido abusos sexuales durante su infancia, según la Organización Mundial de la Salud.

Eneas Espinoza fundador y coordinador de la Red de Sobrevivientes de Abuso en Entornos Institucionales de Chile Foto Florencia Downes
Eneas Espinoza, fundador y coordinador de la Red de Sobrevivientes de Abuso en Entornos Institucionales de Chile / Foto: Florencia Downes.

A su vez, lo novedoso de instalar estas comisiones radica en que en Latinoamérica las comisiones de la verdad históricamente investigaron el terrorismo de Estado.

En nuestro país, la única experiencia que logró llevarse a cabo fue la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) para investigar las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la última dictadura cívico-militar.

Sobre la ampliación de las temáticas de las comisiones, Espinoza agregó que “es una continuación de un fenómeno lógico y natural de que si nos vamos a ocupar íntegramente de los derechos humanos tenemos que ocuparnos de esto también”.

Y precisó: “No es algo nuevo porque ya se hizo en otros lugares del mundo, pero que en Latinoamérica podamos hacerlo implica resolver parte de nuestra memoria y también parte de nuestro presente porque las personas víctimas de estos crímenes han vivido entre nosotros durante todos estos años sin poder hablar, padeciendo una serie de secuelas del abuso que son gigantescas, tanto desde un punto de vista psicológico como físico”.

Las y los activistas entrevistados resaltaron que las comisiones de la verdad ofrecen un “espacio seguro y confidencial para contar esa verdad que no se pudo contar nunca” y aseguraron que el “develamiento produce un efecto positivo en el camino de la recuperación”.

También insistieron en que los países de Latinoamérica necesitan de estas instituciones para esclarecer la real dimensión del problema y dar el primer paso para erradicar la violencia sexual.

“El efecto va a ser multiplicador cuando logremos una comisión en un país. Va a dejar de ser imposible, de ser una locura de unas ‘víctimas locas’ y se convierte en algo real que funciona”, concluyó Espinoza.

“Derecho al tiempo”: cómo es el proyecto en Argentina

El proyecto de ley “Derecho al tiempo Argentina” que propone la imprescriptibilidad de los delitos de violencia sexual sufrida en la niñez y adolescencia, el cambio de denominación del delito y la creación de una comisión de la verdad y la reparación es impulsado en el Congreso por la Asociación Civil Aralma y ahora espera ser tratado en las comisiones de Legislación Penal y Familias, Niñez y Juventudes de Diputados.

Para Sonia Almada, directora de Aralma, es necesario establecer una comisión de la verdad y la reparación sobre abuso sexual padecido en la infancia y adolescencia porque es un “organismo que investiga a gran escala, es independiente y logra una verdad histórica”.

“En Argentina no tenemos estadísticas acerca de la violencia sexual contra los bebés, los niños, las niñas y adolescentes, entonces queremos saber la real dimensión del problema. Y también queremos poder ofrecer un espacio de contención y escucha a las y los sobrevivientes que sabemos que son muchísimos porque llegan a nuestras ONGs”, señaló Almada, quien es una de las principales impulsoras del proyecto presentado a la Cámara de Diputados en julio del año pasado.

La iniciativa se corresponde con las acciones que promueven organizaciones y activistas contra el abuso sexual en niñas, niños y adolescentes de toda Latinoamérica, ya que las comisiones de la verdad se posicionan cada vez más como una herramienta adecuada por parte de los Estados para dar solución a la violencia sexual.

A diferencia de los modelos de comisión que se impulsan en países como Chile, focalizados en abusos institucionales, el proyecto presentado en Argentina busca instalar una comisión sobre abuso y explotación sexual en todos los ámbitos: intrafamiliar, institucional, religioso.

“Nuestra propuesta es que la comisión recorra todo el país relevando e investigando los relatos de las y los sobrevivientes para esclarecer hechos, causas-consecuencias, y formas de agredir que son muy distintas”, indicó Almada.

CAMPAÑAS DE PREVENCIÓN
En la misma línea sostuvo que después de reconocer los testimonios de las víctimas, la comisión dispone de recomendaciones para elevárselas al presidente o presidenta de la Nación y llevar a cabo reformas legislativas y campañas de prevención.

“No hay campañas de prevención del abuso sexual en Argentina, pero nunca hubo porque no se lo ha pensado como un problema de salud pública”, apuntó la psicoanalista y escritora.

En nuestro país una comisión de la verdad se puede establecer por dos vías legales: “Por un lado, mediante un decreto de necesidad y urgencia, que cree la comisión en el ámbito de un ministerio y, por el otro, con una ley que también va a crear una comisión en el ámbito de un ministerio pero que, al ser sancionada por el Congreso, puede otorgarle unas facultades más amplias”, indicó a Télam Martina Olivera, abogada especializada en derechos humanos.

Expertos argentinos y extranjeros debatirán sobre el rol de las comisiones

Un evento para debatir sobre la creación de comisiones de la verdad en respuesta a la violencia sexual en las infancias y adolescencias en los países de Latinoamérica se realizará el próximo viernes en la provincia de Buenos Aires con la participación de disertantes de referencia internacional y sobrevivientes de abuso.

Organizado por la asociación civil Aralma de Argentina y la Red Internacional por los Derechos de lxs Niñxs (Crin), el encuentro titulado “Explorando las posibilidad de establecer una comisión de la verdad en respuesta a la violencia sexual en las infancias en Latinoamérica” busca aprender de las experiencias que ya se hicieron en otros países y analizar qué obstáculos se pueden presentar en la región.

De la jornada con más de quince paneles participarán expertos y activistas del Reino Unido, Alemania, España, Australia, México, Costa Rica, Perú, Chile, Estados Unidos y Argentina.

Foto Florencia Downes
Foto: Florencia Downes.

Entre las charlas, se destaca la participación online de especialistas que han desarrollado en sus países las comisiones de la verdad con resultados positivos, como la socióloga australiana Katie Wright o la expresidenta de la Comisión Independiente de abuso sexual de niños, niñas y adolescentes de Inglaterra y Gales, Alexis Jay.

También disertará el activista español Miguel Hurtado, sobreviviente de abuso sexual eclesiástico, quien repasará los obstáculos que hasta el día de hoy impiden establecer en su país una comisión de la verdad.

Por parte de Argentina, participará Sonia Almada, psicoanalista y presidenta de Aralma; Claudia Amigo, doctora en Psicología con especialización en abuso sexual infantil; y Gabriel Páramos, Prosecretario Letrado de Fiscalía General.

Además, la diputada nacional Mónica Macha encabezará la mesa “Construcción política: Mesa nacional y Comisiones de la verdad en abuso sexual infantil”.

Por otro lado, el abogado Javier Moral, especializado en la representación de víctimas de abusos sexuales como Lucas Benvenuto o el caso Boy Lovers, expondrá acerca de los métodos de captación y su trazabilidad en la comisión de la verdad.

También presenciarán otras charlas Vicente Suárez Wollert, encargado de comunicaciones de la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos de Argentina y la abogada Martina Olivera, quien expondrá los resultados de su investigación sobre cómo crear una comisión de la verdad en nuestro país.

Desde Perú, José Enrique Escardó Steck, periodista y fundador de la Red de Sobrevivientes Perú, contará cómo se llevó adelante una comisión investigadora dependiente del Congreso.

De cara al evento, Escardó Steck aseguró a Télam que “es interesante ver qué están haciendo en otros países” y agregó que “si bien las características de cada país son diferentes, es muy importante entender que no estamos solos, que estamos trabajando en lo mismo”.

“La única forma en que vamos a poder seguir avanzando, porque hemos avanzado mucho, es conociendo qué es lo que estamos haciendo, inspirándonos entre nosotros y ayudando a las personas a tener una mejor comprensión de la realidad”, resaltó.

El evento, de acceso cerrado, se desarrollará el viernes 14 en la localidad bonaerense de Olivos y, una vez concluido, se publicará un informe con todas las conclusiones.

El caso de la comisión de la verdad australiana

Con más de 8.000 sobrevivientes que compartieron su experiencia de abuso sexual durante su niñez, la comisión de la verdad de Australia, que presentó su informe final en 2017, es una de las investigaciones públicas más grandes sobre este tipo de violencia en instituciones a nivel internacional, y su experiencia se convirtió en un ejemplo al impulsar desde reformas legislativas hasta un programa nacional de reparación financiera para las víctimas.

“La Comisión Real sobre Respuestas Institucionales al Abuso Sexual Infantil fue una de las investigaciones públicas más grandes jamás realizadas en Australia”, indicó en diálogo con Télam Katie Wright, catedrática en sociología en la Universidad La Trobe, en la ciudad australiana de Melbourne, y especialista en comisiones de investigación de abusos institucionales cometidos contra niños, niñas y adolescentes.

La comisión fue establecida formalmente en enero de 2013, luego de que durante décadas organizaciones de la sociedad civil y activistas instaran a su creación, y el informe final se publicó en diciembre de 2017.

“Las Comisiones Reales son la forma más alta y prestigiosa de investigación pública en Australia y se utilizan para abordar cuestiones de gran interés social”, explicó Wright.

El informe relevó que unas 3.489 instituciones fueron acusadas de haber cometido abusos sexuales.

El 58,1 por ciento de las y los sobrevivientes dijo que el abuso tuvo lugar en una institución dirigida por una organización religiosa; el 32,5 por ciento en una institución administrada por el gobierno; y el 10,5 por ciento en una institución que no era gubernamental ni religiosa.

Respecto a cómo funcionó esta comisión conformada por seis comisionados y que contó con un equipo de apoyo, la doctora en sociología indicó que se realizaron audiencias públicas en instituciones en diferentes partes del país y se escucharon a más de 8.000 sobrevivientes en sesiones privadas.

Entre los principales resultados de la investigación, Wright destacó que se estableció un Esquema Nacional de Reparación para sobrevivientes, tanto financiera como de otro tipo, sin tener que pasar por un proceso legal.

También subrayó la sanción de reformas legislativas para mejorar la protección de las niñas y niños, y que la comisión le dio “prominencia al tema del abuso sexual infantil para el público en general y ayudó a que esto fuera ‘decible’ de una nueva manera, gracias a la amplia cobertura mediática que recibió”.

A su vez, la Comisión Real impulsó la creación de sitios de memoria, como el Museo del Orfanato de Australia que fue inaugurado el pasado 1 de abril y revela “la brutalidad y las privaciones en las instituciones que se suponía que cuidaban de los niños”, aseguró a Télam Wright desde Australia.

Consultada sobre qué elementos pueden tomar los países de Latinoamérica de la experiencia australiana para impulsar sus propias comisiones de la verdad, Wright advirtió: “para que una investigación sea efectiva debe ser independiente, por ejemplo, de gobiernos e iglesias”.

Asimismo, puntualizó que deben adoptar un enfoque informado sobre el trauma y consultar ampliamente con los sobrevivientes, al tiempo que deben “preocuparse por reparar los abusos del pasado y brindar justicia a las víctimas”.

Por último, remarcó que “es absolutamente posible investigar con éxito los abusos que ocurrieron en el pasado” y agregó que establecer la verdad “es importante para que las víctimas-sobrevivientes sanen, para que las sociedades asuman la responsabilidad de las historias difíciles y para que los niños estén más seguros en el futuro”.





Fuente: TELAM